PROGRAMA ERICA: CONTROL DE SALUD ADOLESCENTE


Trabajo conjunto con la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial
La Secretaría de Salud Municipal busca detectar riesgos cardiovasculares en adolescentes

Este martes se llevó a cabo en Batán una nueva jornada del programa ERICA (Estudio de Riesgo Cardiovascular en Adolescentes). "Se hizo una reunión con los directores de distintos establecimientos educacionales, presentándose un estudio de investigación para la evaluación de factores de riesgo vascular en adolescentes de entre 10 y 18 años de edad", señaló Alejandro Cristaldi, subsecretario de Salud.

El funcionario explicó que –a través de estas jornadas desarrolladas en el Jardín Municipal de Batán- "se buscará la detección de obesidad, hipertensión, diabetes, hipercolesterolemia y tabaquismo” en esa franja etarea.

“Esto es una iniciativa que ya tiene dos años, en donde la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial quiere hacer un estudio y para eso eligió la localidad de Batán, porque cumple con los requisitos para poder llevarlo a cabo. La Secretaría de Salud -a través de su Área de Docencia e Investigación- coordinará estas acciones. La Municipalidad pondrá, entre otras cosas, el laboratorio para poder llevar adelante los estudios y los análisis estadísticos de los resultados", afirmó.

Cabe señalar que desde la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial están participando en esta actividad los doctores Daniel Moya, Gustavo Blanco y Walter Abraham, que son los diseñadores del programa. "La idea es estudiar la prevalencia de estas enfermedades en los adolescentes escolarizados de 10 a 18 años", aseguró Abraham.

En ese sentido, aseguró que "el estudio consta de dos etapas: la primera consiste en hacer una encuesta a los padres acerca de los antecedentes familiares, firmando luego un consentimiento que autorizará a sus hijos a participar de los estudios", consignó.

"Luego, al niño se lo mide, se lo pesa, y se le controla la presión en varias oportunidades, separadas por un par de minutos cada toma. Se hace un promedio y los chicos cuyos resultados son elevados, se vuelven a citar para que sean controlados en visitas sucesivas porque no es suficiente con el registro obtenido de un solo día", detalló.

La segunda etapa consiste en que "a aquellos adolescentes cuyos padres hayan dado su autorización, se les practica una extracción de sangre, para ver si son diabéticos, y detectar los niveles de colesterol, triglicéridos y creatinina, que nos sirve para evaluar la función renal en los chicos. De este modo se los incluye en un programa para que tengan un mejor control y, en caso que las haya, cambiar el curso de estas enfermedades", concluyó Walter Abraham.

0 comentarios: